¿C U Á L F U E L A
L O C U R A Q U E T U
A L M A N E C E S I T Ó
P A R A S O B R E V I V I R ?
Esta pregunta del titulo te para, te permite entrar en un
espacio de tu mente que contiene pasado y presente.
La locura que tu alma necesitó para sobrevivir es
aquello que desarrollaste como personalidad, creyendo
que forjabas tu carácter, cuando lo único que hacías
era protegerte de aquello más temías.
Esa locura contenía un peaje, en forma de estructura
cognitiva que llamaremos fijación, y otro en forma de
estructura emocional que llamaremos pasión.
La fijación y la pasión se toman de la mano y bailan un
rock & roll contigo de cuerpo presente, aunque tú
de ello eres totalmente inconsciente.
Entonces luchas, te movilizas, sufres, peleas, amas,
trabajas, te relacionas, te evades con personas que aparecen
en el camino por diferentes razones, sin darte cuenta
que lo haces en base a tus motivaciones.
Tus motivaciones, como decíamos, son inconscientes
mientras no puedes verlas, y buscarás a quien
crees que las pueda rellenar.
Con una estrategia para ir por la vida, a la que le darás el
nombre de personalidad, y te la tomarás en serio, la defenderás.
Aunque lo cierto es que es una banalidad.
Pensarás que para ello, esta o aquella persona es compatible
contigo, le gusta lo que a ti, o que os complementáis al ser
diferentes, o cualquier punto de conexión entre ambas, para
saciar y calmar ese hueco, que en tu alma
ha quedado como un pozo seco.
Ese hueco, si lo miras bien, si llegas al fondo del
hueco, verás lo que hay en lo más hondo.
Y allí podrás ver que hay lo mismo que en todos los demás
huecos, una necesidad, una carencia de aceptación, de
reconocimiento, de cariño, matices que en
realidad son la necesidad de sentir amor.
Curiosamente esa necesidad de sentir amor genera toda la
locura que necesitó tu alma para sobrevivir sin él, donde a
partir de entonces andarás fuera buscándolo.
Pero hasta que no mires hacia dentro, no te podrás
sorprender encontrándolo, ya que, si observo que ese amor
pasa por mi corazón y lo siento a través de mi,
¿cómo pretendo sentirlo a través de ti?
No me había dado cuenta que la locura, más allá de los
matices de la personalidad forjada, era buscar la limosna
del amor a través del otro, que con unas palabras, o una
acción pueda sentir que me quieren, tomándome así un
caramelo psicoemocional, que dura lo que dura el
caramelo, y por eso se queda esa cara de lelo.
Entonces comprendí que la locura, era buscar algo, que
ya estaba allí, era tener el corazón como si fuese el cerebro,
y el cerebro como si fuese un libro de ruta
donde consultar por dónde ir.
Y todo lo que tenía que hacer era escuchar y
abrirme al corazón, que ya me veía venir.
Fuente: Jose Luis Rosa