ENTREVISTA A
SERGI TORRES
Todo el universo tiende a expandirse
excepto la conciencia humana.
¿Qué quiere decir esto?
La mecánica de nuestro universo es, en estos momentos,
expansiva. Ese movimiento de expansión incluye a
todo lo que constituye el universo.
Este movimiento natural, aplicado a la
conciencia humana, se le llama evolución.
La conciencia humana vive evitando
este impulso que la lleva a evolucionar.
¿Por qué es así?
Debido al miedo. El miedo es una
fuerza opuesta a la expansión.
Si miramos hacia atrás en la historia de la humanidad,
veremos que, en todos los momentos de evolución,
el miedo ha dictado los tiempos de asimilación de ese avance.
Me refiero, por ejemplo, al momento en que Aristarco
de Samos en el siglo II a.C. nos dice que el Sol no da
vueltas alrededor de la Tierra y unos 700 años más
tarde, Galileo Galilei es juzgado por demostrar esa
verdad que las personas de aquella época no eran
capaces de aceptar, debido al miedo que
suscitaba una nueva concepción de la realidad.
Y sin embargo, desde que
nacemos (y quizás antes),
la vida es una cadena de experiencias
de expansión de la conciencia -
respirar, comer, caminar, aprender, amar…
¿Cuándo se para esta tendencia
a la expansión y por qué?
Cierto. Nuestra vida es nuestro universo particular y, como
tal, trata de expandirse y expandirnos.
Este impulso nunca desaparece, pero nosotros nos
desvinculamos de él y lo olvidamos cuando empezamos
a etiquetar a nuestra vida. Eso coincide con el desarrollo
de la personalidad y su establecimiento
como marca de nuestra identidad.
Recordemos aquella escena en la que un niño cae
al suelo y se hace daño y, sorprendentemente, lo
primero que hace es mirar a su alrededor en busca
de sus padres para poder ver qué significado tiene
lo que le ha ocurrido. Si sus padres reaccionan con
tranquilidad, el niño también lo hace, si reaccionan
agitados , el niño reacciona agitándose.
Cuando crecemos ya no miramos a ver qué sentido
tiene lo que ha ocurrido porque lo vemos a través de
nuestra personalidad, que da sentido a todo de forma automática.
¿Qué quiere decir que
los milagros existen?
¿A qué nos referimos
cuando hablamos de “milagros”?
Un milagro es todo aquello que transgrede las leyes de
nuestro mundo, tal y como nosotros lo conocemos.
Un milagro tiene como función invitar a la conciencia que
vive dentro de la personalidad a ir más allá de sus
límites. En ese sentido, a cada instante ocurre un milagro,
pero nosotros hemos perdido la capacidad de verlos
al limitar nuestra percepción a nuestros sentidos físicos.
Los milagros suelen expresarse en las cosas más simples
y cercanas a nosotros, y esa es otra razón por
la que los milagros ya no se viven.
En términos actuales, una mentalidad milagrosa es una
mentalidad libre, emprendedora y puramente creativa.
Un milagro no es que nuestra vida cambie radicalmente
con la lotería. Un milagro es encontrar la felicidad en
nuestra vida tal y como es ahora. Eso sí es
ir más allá de las leyes de nuestro mundo.
Caminar hacia aquello que eres.
¿Somos algo definido y concreto? ¿Qué?
Existe en cada uno de nosotros un espacio interno
del que muy pocos son conscientes.
El peso de nuestra consciencia está dirigido hacia
fuera de nosotros. Tanto es así, que buscamos sentirnos
bien con nosotros mismos a través de cosas externas.
Esta actividad prolongada en el tiempo nos lleva a
crear una personalidad alejada de nuestra esencia.
Cuando la conciencia recuerda la esencia, las palabras,
ni expresadas por un poeta, alcanzan a
describir esa identidad del ser interno.
Nada en nuestro mundo nos enseña a recordar esta
profundidad, de ahí la necesidad de andar
la vida en dirección hacia uno mismo.
¿Por qué tendemos a
estancarnos en
el conflicto y a repetir
pautas una y otra vez?
Todo lo que nos ocurre en nuestra vida refleja nuestra
forma de pensar. Si somos verdaderamente honestos,
veremos que siempre le estamos dando nuestro
propio significado a lo que nos ocurre.
Esto genera un patrón cerrado, ya que siempre vemos
lo que pensamos y lo que vemos corrobora lo que pensamos.
Así es como nos convertimos en esclavos de nuestros
pensamientos y de nuestras emociones, y creemos
que nuestras propias emociones y
pensamientos definen nuestra identidad.
Nuestra vida trata de romper este patrón a través de
los conflictos, sin embargo, la respuesta que damos
es la de defendernos de ellos en lugar de usarlos
para transformarnos. Eso nos lleva a
reaccionar en lugar de crear.
¿Cómo salir de las pautas?
¿Cómo sabemos que
hemos resuelto el conflicto?
El conflicto tiene como función evidenciar nuestros pensamientos
y sus emociones resultantes, que se ocultan en nuestro
inconsciente generando los conflictos.
Para poder salir de esta pauta, debemos enfrentarnos a
nuestros pensamientos y emociones, en lugar de tratar
de evitarlos o rechazarlos. Enfrentarse significa “ponerse
enfrente de” y no implica ningún tipo de fuerza.
Cuando aprendemos a acoger todo lo que pensamos y
sentimos de forma incondicional, entonces las emociones
y los pensamientos no se estancan y fluyen. Este fluir
nos lleva a sentir con más intensidad, y luego esa
intensidad se convierte en paz. Cuando siento paz
ante un conflicto, entonces sé que ese conflicto se ha
disuelto. Éste es un proceso natural que
requiere voluntad, coraje y paciencia.
¿Qué significa “oír más allá
de cada percepción”?
¿Cómo entrenarnos
para percibir más?
Pensamos que lo que creemos que es nuestra realidad es
nuestra realidad y no vemos que eso es sólo lo que creemos.
Según el “Tratado de fisiología médica” Guyton-Hall
“El cerebro desecha más del 99% de toda la información
sensorial, por carecer de interés o importancia.” Esto
significa que creamos nuestra propia interpretación de
la realidad a partir del procesamiento del 1% de la información
disponible, y esta información además está muy limitada
por nuestros sentidos físicos, que no perciben todas las
frecuencias de colores ni de sonidos existentes.
¿Cómo puedo entrenarme a ver más allá de lo que mi
cerebro me muestra? Aceptando lo que me muestra y luego
no usando lo que me muestra para determinar
mi realidad ni la de los demás.
A eso se le llama no dar nada por
sentado o mejor aún, no juzgar.
La mejor entrenadora que yo conozco es mi propia vida.
La vida está diseñada para enseñarnos que cada vez
que creemos algo porque así lo percibimos, nos equivocamos.
¿Qué significa “despertar”,
vivir la vida como un sueño?
Vivir sometido a tu realidad cerebral, en términos de
conciencia, se le describe como un estado de somnolencia.
En éste, la mente vive una experiencia regida por
el cerebro, pero no es consciente de que mente y
cerebro no son lo mismo, así como yo
y mi personalidad tampoco lo somos.
Cuando empezamos a darnos cuenta de que la
personalidad es un simple vehículo de expresión de
la conciencia, y que el cerebro es solo un órgano
de expresión de la mente, entonces decimos que estamos
despertando. Es un estado de ser consciente de nosotros
mismos más allá de la cultura, de la sociedad y la época.
¿Qué significa que el cuerpo no existe?
¿Qué nos aporta ese conocimiento
(esa experiencia) en la vida cotidiana?
Creemos que somos nuestro cuerpo y que éste es el
que marca nuestra experiencia de vida.
De ahí que si el cuerpo muere, nosotros también.
Cuando nos damos cuenta de que el cuerpo es un
vehículo que contiene nuestra conciencia y que esa
conciencia es por naturaleza ilimitada, comprendemos
que el cuerpo no es aquello que creemos que es.
Cuando somos conscientes de que nuestro cuerpo
no es nuestra frontera, vivimos la vida de otra forma. La
competitividad, el apego, la pérdida, la soledad, la
necesidad, empiezan a disolverse. Esto significa
un gran paso hacia la liberación
de nuestras mentes del sufrimiento.
¿Por qué nos resulta tan difícil
amar -aún habiendo
pasado por la experiencia
de que sólo el amor te ofrece
la paz, la serenidad, alegría, etc?
¿Por qué lo olvidamos?
Los seres humanos no sabemos amar.
Creemos que el amor es una emoción y hemos
olvidado que es una conciencia que nos une
a todos y nos ofrece un sentido de plenitud.
Así que, para amar, de nuevo tenemos que sobrepasar
los límites de nuestra personalidad y eso aún nos aterra.
¿Por qué nos aferramos tanto al
sentido del “yo”, que nos
separa de lo demás (que nos impide
amar), que nos mantiene
en el sufrimiento constante?
El dicho “más vale malo conocido que bueno por conocer”
da fe del miedo que tenemos a la transformación, entendida
como lo que es, ir más allá de la forma (actual) a una nueva vivencia.
Creemos ser la imagen que nosotros tenemos de nosotros
mismos y pensamos que, si la soltamos,
desapareceremos o nos volveremos locos.
Por esa razón, en lugar de soltarla, la vamos cambiando
a lo largo de la vida. Nos hace sufrir más el miedo a
aventurarnos a una experiencia más amplia, que aferrarnos
a una perspectiva limitada de la vida que conlleva sufrimiento.
Esto si es locura, pero como la gran mayoría padecemos
de esta enfermedad, la hemos catalogado como cordura.
¿Qué significa
“volver a casa”?
Es una metáfora. Significa salir de la caverna de las
sombras que Platón describía en el Mito de la Caverna
y ver la realidad sin filtros culturales o sociales.
No conozco a nadie que se sienta como en casa
dentro del mundo que hemos creado como seres sociales
y, sin embargo, en lugar de aventurarnos a ir más allá,
nos empeñamos en tratar de ser felices en la incomodidad.
En cambio, las personas que han alcanzado, aunque
sea sólo unos segundos, tocar la profundidad de su
alma, se han sentido cálidamente acogidas, como
cuando alguien que te conoce
perfectamente te recibe en tu propio hogar.
¿En qué consiste el
curso de milagros?
Es un curso en honestidad. Es un tratado de psicoterapia,
un mapa que parte de nuestra perspectiva actual de
la vida y de nosotros mismos y nos acompaña a través
de unos ejercicios hacia una perspectiva mucho más
profunda, mucho más auténtica de quienes somos.
Fuente: www.sergitorres.com