RECONOCIENDO LA CONCIENCIA DIVINA
EN TODAS LAS COSAS:
UN ACERCAMIENTO
AL TANTRA
con Carlos Pomeda
(1ª parte)
EN ENTREVISTA,
EL MAESTRO DE YOGA
Y TANTRA CARLOS POMEDA,
NOS INTRODUCE CON
GRAN CLARIDAD A LA ESENCIA
DEL TANTRA
El tantra ha invadido la conciencia popular en los últimos años.
El término ha cobrado una cierta aura de fascinación al ser asociado con el
sexo y con un tipo de espiritualidad instantánea y transgresora que permite evitar
los largos procedimientos ascéticos de la espiritualidad tradicional. Esto, por
supuesto, es un entendimiento sumamente superficial y equívoco de lo que es el
tantra (esta frivolización ha ocurrido en cierta forma también con el yoga).
Aunque el tantra es complejo y diverso, podemos acercarnos a una definición
diciendo que se trata de una serie de textos (y la práctica que se deriva de ellos)
que mantienen una continuidad, un cierto engarce con una sabiduría primordial, y
que buscan la liberación utilizando el cuerpo como vehículo, sin renunciar al mundo.
Se ha dicho que el tantra es el sendero de la transformación, el cual, a diferencia
del sendero de la renuncia, transforma o purifica la existencia en el reconocimiento de
lo divino o sagrado en todas las cosas.
Para rectificar y poder acercarse cabalmente al tantra y al yoga es necesario
vincularse con las tradiciones y hurgar en las fuentes indias. En lengua española
tenemos pocos maestros que han establecido un vínculo con la tradición; uno de
ellos es Carlos Pomeda, a quien tuve la fortuna de entrevistar hace poco (...).
Lo que caracteriza a Carlos en su enseñanza es la claridad, esa especial
habilidad de hacer que conceptos complejos y esotéricos se vuelvan sencillos y
cristalinos. Esto es sin duda el fruto de la práctica (que hace de la teoría experiencia)
y de la calma que resulta de la meditación.
Un acercamiento al tantra
Un poquito de tantra puede ser un poco peligroso (parafraseando
aquella frase de que un poco de religión puede ser un poco peligroso).
Con un poquito de tantra puede ocurrir igual. El tantra es un término que
cubre todo una serie de tradiciones que empezaron a aparecer en el siglo V
que fueron una revolución en el mundo del yoga.
El tema principal es que el tantra no acepta la división rígida entre lo bueno
y malo, puro e impuro. El tantra mantiene que todo depende del uso que se le
dé, nada es bueno o malo por sí solo. Esto que parece una afirmación muy sencilla
en el tantra, abrió una serie de cambios en la manera de practicar. Por ejemplo,
involucrar al cuerpo, que era algo que no se había hecho antes porque el cuerpo se
dejaba ahí sentadito en la meditación para trascenderlo. Ahora el tantra se
involucra con el cuerpo y empieza a dedicarse a trabajarlo, por ejemplo, el hatha yoga
es un resultado de esta revolución tántrica y de la misma manera el mantra yoga
como yoga no existía antes del tantra, claro que los mantras sí, han existido desde el principio.
Lo que el tantra hace es que se interesa en el sonido, en las texturas del sonido,
trabajando con el alfabeto y el poder de los fonemas del sánscrito, del sánscrito y sus
correspondencias con los diferentes niveles de conciencia y de realidad. El tantra abrió
toda una tecnología nueva con el uso de mantra.
Tantra en la vida moderna
más allá del sexo
Se me hace una pena que la gente desvirtúe el tantra pensando
que se trata de sexo porque en realidad hay muy poquito de sexo en el tantra
y se pierde todo lo que el tantra tiene que ofrecer, que para mí es el mejor
sistema para el mundo moderno, porque no se basa en la renuncia, en apartarse del
mundo, sino en cómo transformar nuestra experiencia donde estemos y encontrar
lo sagrado en todas partes, literalmente en todas partes.
El tantra es revolucionario, tiene una gran creatividad, desarrolla cientos de
técnicas nuevas, de meditación, de maneras de trabajar con el cuerpo y con la mente.
Tiene una gran riqueza y muchas cosas que aportar, por lo que da pena que
se desvirtúe el tantra original.
¿Cómo te acercaste al tantra?
Yo no sabía nada del tanta, primero me acerqué el mundo del yoga,
a través del hatha yoga y la meditación. No sabía nada de la filosofía de la India.
Fue mi primer maestro quien me empezó a hablar del tantra. En los 70 era muy
difícil encontrar información, había muy poquito publicado, cosas antiguas de
Sir John Woodroffe (Arthur Avalon).
Ya que fui a la India en el año 82, empecé a estudiarlo seriamente.
La manera que yo lo aprendí fue con referencia a textos originales. Entonces estás
viendo qué tipo de ideas o prácticas manejan directamente. Mi formación fue muy
tradicional. Me fascinó tanto cuando empecé a ver lo que el trantra tenía que
ofrecer que a veces estudiaba hasta 12 a 16 horas al día. Me apasionaba.
Estudio-práctica, estudio-práctica. Así fue mi trayectoria. Esto está cambiando hoy
en día lentamente porque el tantra está recibiendo mucha atención en medios académicos.
Entonces están saliendo trabajos muy serios, rigurosos y bien informados.
En el período en el que yo empecé y hasta hoy, sin embargo, ha habido mucha
literatura que no está informada por los textos originales, que son elucubraciones
de la gente, interpretaciones. Hay gran cantidad de libros por ahí que no tienen
nada que ver con las fuentes que se llaman a sí mismas “tantras".
Estoy contento de que hoy en día hay ya estudio académico muy serio,
hay mucha gente en universidades que está publicando trabajos sobre tantra.
Esto me parece que va a ser parte de un movimiento que transformará cómo la gente
experimenta el yoga, puesto que, como sabes, cuando hoy la gente dice yoga
entiende hatha yoga, pero a través del tantra descubres que hay muchísimo más.
Fuente: www.pijamasurf.com